(FOTO: www.marca.com)
España tampoco revalidará corona europea en la categoría Sub19 después de que la selección de De la Fuente haya caído eliminada en semifinales del torneo ante Francia. Fue tras un bonito y disputado encuentro, con opciones claras para ambos equipos, pero donde los franceses supieron jugar mejor los minutos decisivos del choque.
La primera mitad estuvo marcada por la alternancia de golpes. Españoles y franceses buscaron con ahínco la portería rival ambos con su estilo. España intentando elaborar más en mediocampo, liderada por el capitán José Rodríguez. De sus botas y de las de Fede Vico salieron las mejores jugadas de la primera mitad. Sin embargo, fue gracias a un penalti cometido sobre Vadillo cuando el canterano madridista logró inaugurar el marcador.
Francia, por su parte, buscaba el premio del gol con un futbol más directo y la gran actuación de Benzia arriba. El joven delantero del Olympique de Lyon fue una pesadilla continua para los centrales españoles que nunca supieron pararlo. Apenas dos minutos después del penalti convertido por José Rodríguez, el nueve francés igualaba la contienda. Gran pase de Corentin Jean y excelente finalización de Benzia.
A partir de ahí, minutos de mucho tanteo y ocasiones en ambas porterías pero sin demasiado acierto. España ha venido demostrando durante el torneo andar algo escaso de pólvora arriba y hoy tampoco fue una excepción. Por el contrario, la buena actuación de Rubén Blanco bajo palos evitaba el segundo tanto francés. Con el empate llegábamos al descanso.
Tras la reanudación, vimos a una España con las líneas más adelantadas y la sensación de querer ser dueño del partido. Lo cierto es que durante la mayor parte de la segunda mitad así fue, pero adoleciendo nuevamente de un delantero finalizador e, incluso, de algo de fantasía en los últimos metros. Fede Vico aparecía entre líneas pero, poco a poco, su rendimiento fue disminuyendo. Además, De la Fuente optó por sustituir a José Rodríguez para dar entrada a Lucas Torro sin que el equipo notara ninguna mejoría. También había probado antes con Adama Traore, pero los cambios no dieron el resultado esperado. España se fue quedando sin tiempo, consciente de ser mejor que una Francia totalmente replegada que esperaba solamente la llegada del tiempo extra, pero sin obtener premio.
La prórroga ya solo fue un vía crucis para los españoles. Sin mucho ruido, Francia fue haciéndose dueña gracias, sobre todo, al buen hacer de Rabiot en la medular y, tras varios fallos en cadena de la zaga española, Antoine Conte hacia el definitivo 1-2 para los galos antes del descanso. A pesar de tener tiempo para dar la vuelta, España nunca dio la sensación ya de creerse capaz de levantar el partido y terminó por bajar los brazos y asumir su desgraciado final.
España no fue inferior a Francia, pero volvió a dejar la sensación de que en las categorías más jóvenes de la selección aún queda mucho camino que recorrer. Nadie pone en duda el estilo y el camino a seguir, pero falta concretarlo. Por momentos hubo mucha posesión pero casi totalmente inoperante. Aun así, a esta generación aún le quedan muchos partidos que disputar antes de dar el gran salto. El que determinara si tienen un hueco en la elite o si su camino acaba ahí. De momento, España tendrá que conformarse con ver la final de este Europeo de Lituania desde fuera y el aficionado podrá volver a disfrutar de dos perlas que deja el cuadro del gallo, Rabiot y Benzia. Dos jóvenes que apuntan alto.
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